El pasado es la estela que hemos ido dejando atrás. Son aquellos momentos, situaciones, decisiones, emociones, que hemos vivido y que ya sólo quedan en nuestra memoria, grabados en nuestro inconsciente o plasmado en fotos.
Muchos filósofos y pensadores de la historia, nos han repetido hasta la saciedad, que nos olvidemos de nuestro pasado, que éste ya no existe que el único momento que existe es el presente. Esta afirmación es bien cierta, el presente es lo único que podemos manejar, es el timón de nuestra vida y de nuestras manos depende la ruta que escojamos.
Pero para nuestra suerte hoy estamos aquí gracias a las decisiones que tomamos en su dia. Somos la suma de momentos y decisiones.
Y sí digo suerte, porque desgracia sería que no pudieramos trabajar nuestro presente que éste estuviera congelado, y no pudieramos conseguir el futuro que anhelamos.
MALA GESTIÓN DE NUESTRO PASADO
A veces el pasado nos ata, nos estanca o sencillamente nos corta las alas, nos deslumbra diciéndonos que él es la experiencia y que por ello debemos mantenernos bajo su zona ya que ahí estaremos seguros. Conocemos las situaciones y no hay cabida a la incertidumbre, y por lo tanto no existe el miedo. Prácticamente no hay que tomar decisiones complicadas, sólo seguir la inercia de la vida.
¿CÓMO HE LLEGADO A ESTO?
La respuesta es bien simple, has llegado a lo que te has convertido, gracias a la suma de las decisiones que tomaste ayer, antes de ayer, el año pasado....
Es importante aceptar la responsabilidad de la vida de cada uno, ya que nadie más que nosotros somos los responsables de nuestros hechos.
Si miras tu presente y te gusta, sigue trabajando para moldear el futuro que deseas, pero por el contrario si tu presente te hace sentir vacío, sólo tienes que dar media vuelta para mirar a tu pasado, coger papel y lápiz y escribir aquellas decisiones que tomaste que quizás no deberías haber tomado, y anota al lado porqué las tomaste y porqué no las deberías haber tomado.
Seguro que se te vienen a la memoria, situaciones que tuvieron consecuencias importantes en tu vida.
Es un simple ejercicio que por supuesto no hará que cambies tu pasado, pero será tu hoja de ruta para diseñar el camino de tu futuro. Quizás no sabrás a ciencia cierta la dirección exacta que debes tomar, pero sabrás seguro cual debes desestimar.
EL PASADO COMO RECURSO RICO
El pasado es nuestra arma, es nuestra base y gracias a él podremos crear unos cimientos sólidos sobre los que construir nuestra vida. Hacer de nuestra historia, un instrumento valioso para crear nuestro futuro.
¿CÓMO VOY A CAMBIAR LO QUE SOY SI ESA ES MI IDENTIDAD?
Alguien dijo renovarse o morir. La vida está en continuo cambio y si seguimos los viejos patrones pasaremos de moda en tan sólo un segundo.
Cambiar de manera de pensar o de hacer, simplemente significa aprender y evolucionar.
Aprender a tomar decisiones que vayan en consonancia con nuestros deseos, asumir las consecuencias y si los resultados no nos gustan o no son los esperados, reinventar las soluciones.
El pasado somos nosotros, es nuestra historia personal, pero recuerda que no puede perseguirnos ni atraparnos, porque ya no es real.
Lidia Menchen Palau
Psicomusicoterapeuta
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